Usar tacón alto con asiduidad disminuye flexión dorsal del tobillo y provoca deformidades

Los zapatos de tacón alto, como calzado de diario, han descendido de las pasarelas y cada vez están más presentes en la calle.

Se trata de una moda con efectos nocivos, puesto que el uso habitual de este tipo de calzado conlleva alteraciones significativas en el rango de movimiento del tobillo (ROM), por sus siglas en inglés, y en la fuerza muscular de la zona, según investigadores de la República de Corea.

Un reciente estudio de la Universidad de Seúl, en Corea del Sur, analizó la mecánica del tobillo en diez mujeres que llevaban zapatos de tacón alto con regularidad (al menos tres días a la semana durante los últimos seis meses) y en otras diez mujeres, con la costumbre de portar calzado plano.

Los especialistas encontraron que la flexión plantar (movimiento que incrementa el ángulo aproximado de 90º entre la parte frontal del pie y la tibia) y la inversión (antepié en varo y supinado, o rotación de la planta del pie en dirección al otro pie) fueron significativamente mayores (25 y 10 grados, respectivamente) en el grupo de tacón alto, en comparación con el grupo de tacón plano.

Por el contrario, en las usuarias de zapatos altos disminuyeron unos 17 grados la dorsiflexión (la parte dorsal del pie se acerca hacia la tibia), y 13 grados la eversión (rotación externa del pie con elevación del borde externo del pie).

Los resultados también mostraron que el tacón alto dobla la probabilidad de una contracción concéntrica en la eversión del tobillo, como respuesta a la inestabilidad y la transferencia lateral del centro de gravedad, durante la marcha.

Otro de los signos del abuso de alzas son los juanetes, cuya operación es la quinta más demandada en la seguridad social de Cataluña, con un 70 por ciento de los pacientes que son mujeres, según el periódico La Vanguardia.

También, la aparición de durezas y la artrosis pueden ser consecuencia del uso prolongado de tacones.

Por este motivo, los especialistas recomiendan precaución a las personas que caminen con calzado de tacón alto durante más de cinco horas seguidas, más de seis veces a la semana.

Y aconsejan realizar ejercicios de estiramiento en la dirección dorsiflexión y eversión.